Para “estabilizar la situación de la frontera”, el
presidente venezolano, Nicolás Maduro, ordenó la implementación de un estado de
excepción por 60 días en cinco de los municipios del estado Táchira, fronterizo
con Colombia (Bolívar, Ureña, Junín, Libertad e Independencia).
Se trata de una figura establecida en la Constitución en su
artículo 337, que puede decretar solo el presidente de la República, cuando
“circunstancias de orden social, económico, político, natural o ecológico
afecten gravemente la seguridad de la Nación, de las instituciones y de los
ciudadanos y ciudadanas”.
De la misma forma, anunció el cierre “indefinido” de la
frontera, en lo que respecta a Táchira, más allá de las 72 horas que había
establecido el pasado miércoles.
El mandatario venezolano anunció la decisión un día después
de dar esa orden, motivado por el ataque sufrido por un convoy de la Guardia
Nacional en el que resultaron heridos dos funcionarios militares y que el
gobierno venezolano atribuye al “paramilitarismo”, según su versión, infiltrado
en Venezuela desde Colombia.
“La frontera queda cerrada hasta nuevo aviso”, dijo el
presidente Maduro quien, además de los 60 días que le permite la Constitución
para el estado de excepción, aseguró que podría tomar otros 60 días.
El decreto de estado de excepción significa un
endurecimiento de la posición venezolana sobre el control de la frontera en
tanto que permite al Gobierno la suspensión de garantías constitucionalescomo
el derecho al libre tránsito o libre reunión “salvo las referidas a los
derechos a la vida, prohibición de incomunicación o tortura, el derecho al
debido proceso, el derecho a la información y los demás derechos humanos
intangibles”.
La posibilidad de esta suspensión hace de los estados de
excepción una de las decisiones más graves establecidas en la Constitución
venezolana y se espera que, al tratarse de una situación extraordinaria, los
cuerpos militares y policiales tengan más presencia y control sobre las zonas
afectadas, en este caso los municipios citados.
El presidente aseguró que Venezuela se encuentra bajo un
“ataque masivo” y entre otras justificaciones señaló de nuevo el contrabando de
extracción que estaría drenando de Venezuela todo tipo de productos hacia
Colombia, desde llantas hasta alimentos y gasolina. Sin embargo, señaló que el
fin último del decreto es luchar contra el paramilitarismo y las bandas
criminales que, asegura, han entrado a Venezuela provenientes de Colombia.
Sería la primera vez que en Venezuela se decreta una
situación de ese tipo desde que fue promulgada la Constitución de 1999. (EN/El Tiempo de Bogotá)
No hay comentarios:
Publicar un comentario